sábado, julio 26, 2008

Tardes de internet

No se cómo comenzar a escribir esta nota, pero veremos qué es lo que sale de ella. Tengo la idea clara en la cabeza, pero no se si eso bastará para expresar fluidamente mis pensamientos. Hace unos días leí una nota en un portal de internet respecto de la llamada "generación facebook", que es la fiebre en la que muchos hemos caído. Era una nota de un siquiatra, quien advertía de los riesgos que provoca la adicción a este tipo de herramientas de comunicación, especialmente en los más jóvenes, que son más propensos a utilizar estas herramientas computacionales.
¿De qué hablaba esa nota? Principalmente de la identidad que podemos ocupar, y de cómo cambiamos nuestra personalidad con una fotografía, un nick o un comentario en donde resumimos algo que queremos desahogar...
¿Desde cuando comenzó todo esto? Recuerdo la primera vez que me hice un correo electrónico - que aún conservo - y que lo llamé con un apodo. Creo que ese es un punto de partida en donde luego, además de los correos, vinieron los fotologs, los flickr, los blogs hasta llegar hoy al facebook.
¿En qué nos ayudan estas herramientas de comunicación? En mucho. A través de ellos, mantenemos contacto fluido con nuestro mundo alrededor... de hecho, yo a través de blogs y facebook, he conocido a gente maravillosa, con quienes mantengo un contacto y hasta amistad. Ha sido además una ventana para comunicar mis ideas y pensamientos, que muchos agradecen. Creo que la globalidad nos ha permitodo a todos mantener contacto con muchos.
¿Riesgos? Los que advertía la nota antes mencionada... que no logramos mantener verdaderos y reales lazos con otros, sino que mostramos apenas una parte de nosotros, muchas veces, lo que queremos que se conozca. El riesgo para los más jóvenes, es el hecho de que no son capaces de mantener relaciones duraderas y estables con los demás: si me molesta algo, o alguien, lo borro de la lista de contactos, y listo... o cierro la cuenta de correo, y listo... o cambio mi foto para mostrar... y soy otro... o me creo un personaje para ocultar mi vida, siendo solo real dentro de un computador.
Otro riesgo, además de la inestabilidad de nuestra personalidad, es que puede ser un mundo paralelo, en donde muestro un rostro por internet, una personalidad o un carácter, mientras en la vida real, con las personas que veo a diario, soy otro... así, tenemos casi bipolaridad en las relaciones humanas.
Por favor, tampoco generalicemos, pero es un riesgo, del que hay que hablar especialmente con los más jóvenes que pueden utilizar como un escudo este mundo para evadirse del real. Se que esta nota no responde necesariamente a todos los que utilizan estas herramientas, pero hay que tener cuidado.
¿Es moda? Creo que si... pasaron los ataris, y sobrevivimos... pasaron las mascotas virtuales, y sobrevivimos... pasaron los cds, y sobrevivimos. No creo que estas herramientas sea la última forma de comunicarnos, evolucionaremos más aún; pero tenemos que darles el espacio que se merecen. Jamás reemplazarán a un abrazo, a una caricia, a un apretón de manos o un abrazo. Eso quedará, aunque la tecnología trate de acercarse, jamás la reemplazará. Bendiciones.

viernes, julio 11, 2008

Fin de semana

Dia viernes... ¡¡¡Qué rico, fin de semana!!! una frase que escucho semana a semana, y que hoy se vió potenciada porque en Chile es el inicio de las vacaciones de invierno de los escolares. Para la inmensa mayoría de los mortales el fin de semana es sinónimo de descanso y relajo del trabajo... tiempo para hacer algo entretenido, o para programar un paseo, o una salida nocturna, etc... siempre me invitan en estos días a salir o a ir a un asado, o incluso de paseo. ¡¡¡Imposible !!!, es lo primero que les digo.

La vida de un sacerdote, y especialmente los que trabajamos pastoralmente en parroquias, los fines de semana son sinónimo de tareas pastorales que cubrir (Misas, jornadas, grupos, etc). Los únicos fines de semana que tenemos libres son los que caen dentro de las vacaciones, pero el resto, es muuuuyyy dificil, por no decir imposible.

Claro, tenemos un día libre a la semana, que a veces me lo tomo (cuando se puede), y es ahí en donde les digo a mis amigos que me inviten... Es extraño, mientras todos se relajan, uno entra en una especie de concentración para realizar sus labores pastorales wiken...

La vida de un sacerdote está marcada parece por corrientes distintas a las de los laicos, que llevan otros ritmos de vida. ¿extraño, no? Pero así es la vida. Recuerdo de niño haber visto a los sacerdotes que aparecían por la comunidad en la que vivía, y pensaba " que rico el ser sacerdote, solo trabajan el fin de semana"... increiblemente, hoy hay gente que piensa que eso es realidad... Jejejeje...

Bueno, ustedes que tendrán tiempo para leer blogs este fin de semana, cuando lean estas líneas, recuerden que el sacerdote sigue al pie del cañón, tratando de hacer de este mundo un espacio cada vez más divino, y desde el Altar y el Púlpito hablará del amor de Dios y la vida cotidiana.

Cuidense, no se olviden de Dios, que Él es fiel a ustedes. Bendiciones.